jueves, 26 de mayo de 2016

HENNING MANKELL


El  escritor sueco Henning Mankell, maestro de la novela negra nórdica y uno de los narradores más leídos y celebrados de Europa,  su novela, normalmente voluminosa  se devora a velocidad de vertigo, han vendido unos 40 millones de ejemplares en todo el mundo,  las 11 novelas del inspector Wallander, transcurren en la ciudad sueca de Ystad, en la que organizan recorridos turísticos dedicados al paersonaje.
El inspector Kurt Wallander puede ser considerado un alter ego del propio autor, este indica que"solo tenemos tres cosas en común : la misma edad, nos gusta la ópera italiana y trabajamos mucho".

En su duodécima novela de la serie, ANTES DE QUE HIELE, cede el testigo a su hija Linda , en su conjunto, forman un fresco impresionante de la Europa actual, una lectura imprescindible para entender los mecanismos que llevaron al continente a vivir la mayor crisis social y economica desde la II Guerra Mundial.

En la novela Kurt Wallander comienza a sentirse cansado de la rutina , sintoma evidente de la edad, pero escusa  perfecta de su  autor ,para ir jubilando aun personaje que ha explotado demasiado, intentando un relevo generacional, ya que es su hija quien acabará llevando las riendas del caso.
La cotidianidad del taciturno detective y la relación padre-hija son solo el cañamazo en el que se terje una historia, que resulta un convicente alegato contra el fatismo  y una indagación sobre la amistad y sus limitaciones, asi como el caracter odioso y amenazante del mundo de las sectas.

Segun el autor en sus libros intenta dar una imagen mas real de Suecia .

" Son los otros quienes han inventado que Suecia es una utopía "




        EstocolmoSuecia3 de febrero de 1948 -Gotemburgo, Suecia, 5 de octubre de 2015  










viernes, 20 de mayo de 2016

" ANTES DE QUE HIELE " Henning Mankell


Henning Mankell: Antes de que hiele

Idioma original: sueco
Título original: Innan  frosten
Año de publicación: 2002
Valoración: Recomendable

Kurt Wallander comienza a sentirse cansado de la rutina detectivesca, síntoma evidente de la edad, pero también la excusa perfecta de su creador para ir jubilando a un personaje que ha explotado, quizá, demasiado tiempo. Se produce así un intento de relevo generacional (que no parece haber prosperado en sucesivas novelas) ya que es su hija quién, a pesar de su inexperiencia, acabará llevando las riendas del caso. La casualidad – esa gran enemiga, en mi opinión, de todo relato, tanto filmado como escrito – involucrará paulatinamente a Linda: poco a poco comienza a actuar por su cuenta demostrando a sus superiores que es capaz de resolver el más que espinoso asunto. Esto la convierte en la mayor responsable de la investigación de una serie de sucesos gravísimos y en apariencia independientes, que se sustentan en hechos ocurridos décadas atrás, con ramificaciones políticas, seguimiento de los medios de comunicación y razones más que suficientes para el terror colectivo – algo que resultaría insostenible en la vida real –contribuyendo aún más a restar verosimilitud a la historia. Pero la destreza de Mankell en la construcción de artefactos policíacos aporta credibilidad más adelante, al presentar muy convincentemente el comportamiento de Linda, cuya implicación emotiva en el caso unida a su juventud y a su condición de recién llegada le conducen a errores, temeridades e imprudencias en cadena y que, a pesar de su natural desparpajo, no logra evitar algún desastre irreparable.
La cotidianidad del taciturno detective y la relación padre- hija son sólo el cañamazo en el que se teje una historia que, a pesar de sus gruesas costuras, resulta un convincente alegato contra el fanatismo y una indagación sobre la amistad y sus limitaciones, además de una atenta mirada a cuestiones tan diversas como la profunda huella que deja en un hijo la ausencia paterna desde la infancia o el carácter odioso y amenazante del mundo de las sectas.